Si te piden que te imagines a ti mismo comprando un coche nuevo, seguramente una de las primeras cosas que te vendría a la cabeza es el olor que desprenden los vehículos nuevos. Aunque cada coche es distinto, nosotros tenemos la posibilidad de detectar el olor que tiene un coche nuevo.
Con el paso del tiempo y la utilización del vehículo desaparece este perfume, que va siendo sustituido por diferentes olores que atraemos al automóvil y que, mezclados, no son nada agradables. Por esa razón, es fundamental evadir el hábito de comer en nuestro coche, ya que no solo creará malos olores, sino que también, los restos que dejemos tienen la posibilidad de promover la aparición de bacterias en nuestro vehículo y esto afecta a nuestra salud.
Limpiar seguidamente tu coche es la principal solución a este problema. No obstante, hay maneras más rápidas que tienen la posibilidad de disimular los malos olores, pero solo va a servir para ocultar el olor y durará poco tiempo.
Si eres de los que les encanta realizar la limpieza del hogar, y conoces los productos que se usan, el proceso es sencillo, solo necesitarás 3 gotas de mentol, un poco de base neutra y 3 gotas de aceite importante de cedro. Lo aplicas en tu coche y ya tienes tu olor a coche nuevo.
Si, por el contrario, prefieres comprarlo ya hecho, el mercado da una extensa variedad de ambientadores que te harán trasladar al primer día que estrenaste tu vehículo.
Prevenir la aparición de malos olores del coche
¿Cómo se crea el mal olor dentro del vehículo? El problema se produce en el evaporador que extrae el calor del aire que entra del exterior, en este instante se genera un cambio brusco de temperatura ocasionando que el aire se condense y forme agua, provocando que los conductos del aire acondicionado se carguen de humedad, las bajas temperaturas en los conductos hace casi imposible borrar esta humedad. Una vez que apagamos el aire acondicionado la humedad generada se acumula en puntos específicos del sistema favoreciendo la aparición de Moho, Bacterias y Ácaros, que son con el paso del tiempo responsable de dichos malos olores.
Si nuestro automóvil todavía no posee malos olores tenemos la posibilidad de brindarte unos consejos que te ayuden a prevenir los malos olores:
- Solicita en cada revisión que te inspeccionen el filtro de habitáculo, se recomienda cambiarlo entre los 15 y 30,000 km o al año, este filtro es muy fácil que tenga mucho moho, suciedad y bacterias.
- Cinco minutos antes de terminar el trayecto es recomendable apagar el aire acondicionado y encender la calefacción.
- Hacer el mantenimiento del sistema al menos una vez al año.
- Evita utilizar el aire acondicionado a máxima potencia.
En conclusión, si eres un amante del olor a coche nuevo, no descuides el cuidado y la limpieza de tu coche.